Humedades, ese enemigo tan molesto que surge en nuestros hogares de repente, sin previo aviso, e impregna todas nuestras paredes sin compasión.
Todos hemos sufrido o, en su defecto, conocemos a alguien, que ha sufrido humedades alguna vez, por lo que todos sabemos exactamente lo que es. Pero ¿cuántos de vosotros sabéis ¿los diferentes tipos de humedades que existen? O peor aún, ¿las enfermedades que pueden derivar de ellas? Para combatir las humedades es necesario conocerlas, y hoy, en este artículo, vamos a hablarte sobre los diferentes tipos de humedades y las enfermedades que estas pueden causar.
Antes que nada, ¿qué son y qué tipos de humedades hay?
Bueno, hablando sin tecnicismos difíciles de comprender: las humedades se originan cuando existe una acumulación de agua u otro tipo de líquidos, y esta acumulación se adhiere a las paredes e impregna todo nuestro hogar (primero, la zona origen; luego, se expande por todo lo que tiene a su alcance). El problema real viene cuando existe un porcentaje peligroso de humedad, lo cual sucede cuando supera el 90%.
- Humedades accidentales, que son las que se originan, como su propio nombre indica, por accidente. Es decir, existe una tubería agrietada o rota por la que se filtra agua, debido a dilataciones o extensiones de los materiales…
- Humedades por filtración, que son las que surgen cuando el origen de la humedad (y, en consecuencia, del agua que se filtra) es externo. Es decir, cuando llueve o cuando existen aguas subterráneas que se cuelan hacia nuestro hogar.
- Humedades por capilaridad, lo que se deriva de materiales con intersticios. Un intersticio es un espacio entre dos materiales. Por ese espacio puede acumularse agua, lo que origina la condensación de la misma y provoca la humedad.
- Humedades por condensación, son las únicas que no se originan por acumulaciones de agua. Son las más TÍPICAS en las zonas húmedas. Su origen no es más que la condensación del aire frío y húmedo sobre nuestras paredes, lo que hace que se adhiera a esta la humedad y se extienda sobre nuestros muros.
Aquí encontrarás un estudio profundo y detallado sobre la humedad, sus orígenes y algunos consejos muy interesantes.
Zonas más propensas a sufrir humedades
Si hablamos de zonas como “regiones”, es bastante evidente: cuanto más fría y húmeda sea una provincia, ciudad, comunidad autónoma… más propensa a humedades será, sobre todo las típicas por condensación. Aquí, por poner un ejemplo, puedes comprobar cuáles son las zonas más húmedas de Andalucía.
Pero claro, que no vivas en una zona húmeda no te exime de padecer humedades, porque, como has visto, existen varios factores que pueden dar origen a las humedades. Pero sí que hay zonas de la casa donde se hace más probable padecer humedades: sobre todo, el cuarto de baño… que es donde siempre se está manejando agua (por la ducha, el lavamanos…).
Enfermedades que pueden derivar de la humedad
Las humedades no son algo para tomarse a la ligera. Vamos a hacerte una lista con las enfermedades más comunes que pueden originarse a raíz de una exposición a una humedad prolongada:
- Migrañas. Los síntomas de las migrañas o las cefaleas crónicas se pueden agravar en ambientes húmedos.
- Infecciones de las vías respiratorias. Es decir, que el moho de la humedad se va a colar en tu cuerpo, van a entrar en los pulmones y van a causar problemas respiratorios, sobre todo a personas que ya padecen problemas pulmonares (como las asmáticas).
- Dolencias reumáticas y óseas. ¿Alguna vez has oído lo malo que es el frío y la humedad para el reúma y los huesos? Pues es cierto, porque exponerte a la humedad puede empeorar el reuma, la artritis, la artrosis y debilitar tus huesos.
- Asma. Además de empeorarlo, la exposición prolongada a la humedad y al moho puede dar origen al asma en niños desde los 1 a los 7 años, lo cual es preocupante y peligroso.
- Alergias. Si ya padeces alergias de por sí, exponerte a estos factores externos puede causar que tu alergia empeore (tu porcentaje de alergia aumente).
¿Cómo evitar que esto pueda llegar a pasar?
No podemos evitar las zonas húmedas para siempre, sobre todo aquellas personas que amamos cierto tipo de climas (como los gallegos, por no ir más lejos). Pero, en contraposición, sí que podemos hacer cierto tipo de cosas para que las humedades no empeoren ni lleguen si quiera a aparecer.
La principal que voy a recomendarte es que acudas a un experto, tanto en materiales antihumedad como en combatir las humedades, como es el caso de los profesionales de Plan It, expertos en humedades que conseguirán hacerlas desaparecer para siempre.