Las infusiones son bebidas calientes de origen natural que, muchas de ellas, nos reportan grandes beneficios para la salud. Hemos querido recopilar en este artículo las que, según los expertos, son las más saludables.
En España, la bebida caliente más consumida, con diferencia, es el café. Los españoles mayores de edad tomamos de media entre 3 y 5 cafés diarios. Aunque la cafeína del café nos mantiene despiertos, lo cierto es que es un producto corrosivo para el cuerpo. Además de excitar nuestro sistema nervioso, impidiendo conciliar el sueño, aumenta la tensión cardiaca y daña las paredes del estómago. Todo eso, sin olvidar, que algunos cafeteros podemos llegar a padecer manchas en los dientes difíciles de eliminar.
El café tiene un fuerte poder adictivo. Es una droga socialmente admitida. Como sucede con otras drogas, nuestro umbral de tolerancia va subiendo con el consumo. Tanto es así, que para notar los mismos efectos, tenemos que beber cada vez más tazas de café´, con el consiguiente daño para el organismo.
Ir sustituyendo algunas de las tazas de café que tomamos durante el día por infusiones es una medida que, sin duda, nuestro cuerpo agradecerá. Pero no podemos cambiar el café por otra bebida, que aunque más suave, continúe siendo excitante.
Para asesorarnos sobre el tema hemos querido hablar con María, propietaria y gerente de La Oruga Azul. Una tienda de referencia en tés e infusiones de la ciudad de Burgos. La pasión de María por las infusiones le llevó a formarse durante años en algunas de las academias más prestigiosas del mundo sobre la materia, como la U.K. Tea Academy de Londres.
Estas son algunas infusiones que María nos recomienda y otras que hemos descubierto investigando por nuestra cuenta.
Poleo Menta.
El poleo menta es una de las infusiones más consumidas por la población. Se elabora con las hojas de la menta piperita. Es conocido por sus propiedades tranquilizantes y por mitigar los trastornos digestivos.
Un estudio editado por la Universidad de Urmia (Irán) afirma que sus beneficios para la salud son aún mayores. El pulegone y el mentol, compuestos esenciales presentes en las hojas, tallos y raíces de esta hierva, poseen propiedades antimicrobianas, antibacterianas, calmantes y antiespasmódicos que benefician a diferentes partes de nuestro cuerpo. Con esta infusión podemos aliviar desde una indigestión, hasta un dolor de cabeza, una irritación de garganta y reducimos la placa bacteriana presente en nuestra boca.
Esta variedad silvestre de la menta, que crece ampliamente por buena parte del planeta, como la costa mediterránea, Europa, Australia, norte de África, se ha utilizado con frecuencia como una planta medicinal por parte de la medicina tradicional árabe. La forma más habitual de consumirla era por medio de la infusión. Preparando un té de menta similar a los tés que se elaboran en oriente medio y en el Magreb.
Para ello se infusionan hojas de menta recién cogidas en una tetera con agua caliente. En los arriates de los patios de las casas árabes era costumbre que las familias tuvieran plantada menta, que recogían, según sus necesidades, para este y otros cometidos, como la elaboración de algunos postres.
Té de rooibos.
Esta infusión se elabora con hojas secas de un arbusto sudafricano llamado Aspalathus linearis. Algunas personas lo llaman el “arbusto del té rojo”, debido a que la infusión tiene una apariencia parecida a esta variedad del té. Pero no nos confundamos, el rooibos no es ningún té, no contiene teína. Es una fuente de vitamina C, una de las más concentradas, y nos proporciona hierro, cobre, potasio, magnesio y flúor.
La propiedad medicinal más destacada de esta infusión es que mejora nuestra salud cardiovascular. Reduce la proporción de colesterol malo en la sangre (LDL) y mejora el sistema inmunológico del aparato circulatorio, debido a sus efectos antioxidantes,
En un estudio realizado en Sudáfrica a 40 voluntarios que bebieron durante 6 semanas, 6 tazas de té de rooibos todos los días, se percibió una reducción considerable de los niveles de colesterol en sangre y una mejora de su salud cardiovascular en general.
Esta infusión para que produzca resultados hay que tomarla con regularidad. No podemos decir que es un medicamento. Pero sí es un producto beneficioso si lo integramos dentro de un estilo de vida saludable.
La manzanilla.
La infusión de manzanilla es popularmente conocida por promover el sueño reparador y por aliviar molestias digestivas.
Se elabora con las flores secas de la matricaria camomila, una variedad de margarita bastante abundante en Europa. Se trata de una infusión suave, que no aporta ningún elemento pernicioso a nuestro organismo y, que por el contrario, tiene efectos calmantes y relajantes.
Se dice que una taza de manzanilla antes de dormir facilita el sueño profundo. El extracto de manzanilla tiene un efecto sobre los neurotrasmisores del cerebro similar al de la benzodiacepina, un ingrediente sintético habitual en muchos somníferos. En este caso, la manzanilla es completamente natural. El extracto produce un efecto hipnótico que frena la actividad neuronal, ralentizándola progresivamente, haciendo que sea más fácil conciliar el sueño.
Otra de sus propiedades conocidas es su capacidad para calmar la irritación estomacal, lo cual, contribuye a una mejor reparación de los daños en el estómago y mejora el bienestar de la persona que los sufre.
En este sentido, hay que remarcar que los efectos de la manzanilla son casi inmediatos. No tienes que acumular muchas tazas de manzanilla en el cuerpo para que alivie los dolores de estómago.
Si te cuesta dormir, tienes frecuentes despertares nocturnos o padeces de dolores de barriga con frecuencia, tener en casa una caja de manzanilla es una medida aconsejable.
Infusiones de frutas.
Unas de las infusiones más curiosas que podemos encontrar son las infusiones de frutas. Muchas de ellas se elaboran con frutas deshidratadas, las cuales, al infusionarlas en agua caliente, transfieren su sabor, su olor y parte de sus vitaminas.
Lo más interesante de estas infusiones es que tienen un efecto depurativo. Al tomarlas con cierta frecuencia, nos ayudan a eliminar toxinas del cuerpo por medio de la orina y regulan el tracto intestinal.
Las infusiones de frutos rojos y de frutos silvestres (que incluyen vayas como el arándano y las moras) tienen propiedades antioxidantes y nos aportan una cantidad interesante de vitamina C.
Tenemos una amplia variedad de infusiones de este tipo. Desde infusión de cereza y plátano, hasta infusiones que nos recuerdan el sabor de las fresas con nata.
Aunque estas infusiones hay que hacerlas con agua caliente, la mayoría de ellas las podemos refrigerar y tomar frías, siendo una alternativa interesante para hidratarnos en los meses de calor.
Infusión de jengibre.
El periódico Información incluye la infusión de jengibre entre las infusiones más beneficiosas para la salud. Dice que es una solución idónea para los días fríos, ya que produce un efecto cálido y estimulante en el sistema digestivo, todo eso sin olvidar las propiedades antiinflamatorias del jengibre.
Y es que esta raíz es un antihistamínico natural que nos ayuda a recuperar el tono muscular en esas situaciones de malestar general ocasionado por gripes y resfriados. Se ha demostrado, además, que el jengibre es eficaz para mitigar jaquecas, migrañas y algunos dolores musculares.
Preparar una infusión de jengibre es relativamente sencillo. Basta con cortar una de estas raíces en rodajas y añadirlo al agua que se está calentando antes de que rompa a hervir. Después debemos apagar el fuego y tapar el recipiente durante 10 o 15 minutos, para que el jengibre desprenda su jugo.
La infusión de jengibre podemos tomarla en caliente o en frío. Mezclándola con jugo de limón y miel, tiene un sabor bastante agradable. También, si no queremos complicarnos la vida, tenemos preparados de jengibre rallado o en polvo que encontramos en tiendas especializadas en tés, listos para preparar la infusión.
Té de hibisco.
El hibisco es un arbusto procedente de África y su infusión se elabora con las flores secas de esta planta. Tiene un poderoso efecto depurativo y diurético, que te ayuda a eliminar la retención de líquido y esa incómoda grasa que se acumula en la zona abdominal.
Conocida también como agua de Jamaica o jugo de flor de Jamaica, ya que los esclavos negros procedentes de la zona occidental del continente africano llevaron consigo esta receta a la isla caribeña, tiene la capacidad de calentar y disolver la grasa en aquellos puntos donde se concentra.
Con estas cosas de la dieta hay que ser precavidos y no conviene obsesionarse. El té de hibisco no te va a adelgazar por sí solo, pero si lo incorporas a una alimentación baja en grasas y lo combinas con un poco de ejercicio, te ayudará a reducir unos centímetros de barriga, de cadera y combatirá la celulitis.
En procesos de adelgazamiento, se recomienda tomar una taza de infusión de hibisco al día. Lo puedes tomar como acompañamiento del almuerzo o de la merienda, o como sustituto del café que bebes en la sobremesa. Hay quien lo toma mezclado con zumo de limón en ayunas. Lo que sí debes hacer, para que surta efecto, es tomarlo con regularidad.